Porque un día se creyò que la memoria residia en el corazòn, y de ahì todavìa la expresiòn, decorar, aprender de coro, aprender de memoria, etc.
Igualmente se suponìa que el corazòn era la residencia del juicio, de donde llamamos todavìa hombre de mucha cordura, o muy cuerdo, al de buen juicio, etc.
El corazòn es la parte o entraña principal del cuerpo, considerada por algunos filòsofos como el centro de la fortaleza, la residencia principal del alma y de la vida, y por lo mismo del dolor, del placer, etc.
Los artistas antiguos en la pràctica de las bellas artes no hicieron como los modernos un abuso de este signo. Principiò este en la edad media, y principalmente en el siglo XVI, en que dominaba el gusto por los emblemas y divisas.
Entonces fuè cuando principiaron a verse corazones inflamados, corazones unidos entre sì, etc. etc. para expresar diferentes pasiones o sentimientos. Este gusto fuè tan comùn entonces, que para indicar un hombre de buena fè, se le representaba con el corazòn en la mano; y se diò la misma figura, como se hace todavia, a ciertos dulces y pastas, por una ridícula alusión a la dulzura y buenas calidades del corazón.
Se llamaba guarda corazòn o corazina una parte de la armadura antigua, que solian usar los soldados, y consistia en una pieza de alambre enrejado de cosa de un palmo o mas en cuadro, la que se colocaba sobre lo alto del estòmago afianzada a la cota de malla.
Se vè la figura de un corazòn en las medallas de Cardia en el Chersonesco de Tracia: y en todas es un signo indicativo de aquellas ciudades que tenian un nombre anàlogo al corazòn, cor, cordis, en latin, y Kear, Ker, en griego, e igualmente Karda, Kardias.
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